Aunque, en un principio se había establecido 29 de noviembre como fecha de apertura, las altas temperaturas, de los últimos días, las lluvias y las malas previsiones meteorológicas condicionan la apertura a la espera de unas mejores condiciones.
Las nevadas que cayeron a principios de mes, que dejaron hasta 30 cm en cotas altas, y unas condiciones perfectas para la fabricación de nieve hacían presagiar un temprano inicio de temporada, pero el reciente cambio meteorológico, ha hecho que tanto el espesor del manto como la cota de nieve se hayan visto afectados muy rápidamente.
Aún así, en Cerler el trabajo continúa a pleno rendimiento, ultimando los detalles en la preparación y acondicionamiento de pistas, y también en la fabricación de nieve que continúa cada vez que las condiciones y las temperaturas lo permiten.