En un comunicado, la plataforma considera que el tiempo transcurrido desde que los juzgados de Huesca acordaran la anulación del permiso es un plazo “más que importante” y añade que el cierre se pide no sólo por su “situación ilegal”, sino por el riesgo que supone para los usuarios.
Los portavoces de la asociación, que se refieren al aparcamiento como “la obra más controvertida de la inacabada ampliación de Aramón-Formigal”, destacan que a pesar de que la sentencia es firme desde el 30 de octubre de 2006, Aramón y el Ayuntamiento de Sallent, que concedió la licencia, “han estado dando largas”.