La empresa Montañas de Aragón (Aramón) ha firmado ya el contrato de compraventa de todos los terrenos pendientes de adjudicación del proyecto de ampliación de la urbanización de Cerler, que comprende un total de 18,3 hectáreas de las que ya se habían vendido 4,4 hace justo un año. El grupo López Soriano, ganador con el apoyo de otras empresas del concurso cerrado que Aramón convocó entre cinco empresas para adjudicar la primera fase, ha ejecutado la opción de compra que firmó en ese primer contrato y que vencía el 15 de junio de este año.
La empresa de la nieve de Aragón no informó ayer del precio de venta de los terrenos, aunque ya habían anunciado que esperaban conseguir 120 millones de euros por toda la urbanización. Esta cantidad es su única fuente de ingresos a medio plazo.
Con esta operación se cierran las negociaciones para terminar el proyecto de la ampliación de la urbanización de Cerler, que comenzó a tramitarse en 1966, cuando se creó la estación permutando terrenos edificables con los propietarios del área esquiable. Hasta ahora solo se había urbanizado y construido la llamada unidad de ejecución 1, de 30,5 hectáreas de extensión, y esta venta corresponde a la segunda unidad. De todo el conjunto, 12,7 hectáreas están destinadas a usos comerciales, hoteleros, residenciales y aparcamientos; 1,3 a equipamientos; 2,1 a zona verde y otras 2,1 a viales. Se construirán entre 1.000 y 1.200 viviendas.
No obstante, el grupo López Soriano adquiere estos terrenos después de que el Ayuntamiento de Benasque aprobara en el pleno del pasado 24 de mayo declarar litigiosa la reparcelación de parte de esos suelos, a tres días de las elecciones, en contra del criterio expresado por los técnicos municipales y con solo dos votos a favor de los nueve posibles.
La declaración se produjo a petición de casi todos los antiguos titulares de los terrenos, que han presentado una demanda en el Juzgado de Boltaña. Los ex propietarios exigen a Aramón que les devuelva unas 32 hectáreas de terreno de las 40 que vendieron o que, en su defecto, pague su valor económico actual, según ellos, de unos 85 millones de euros. Los antiguos dueños entienden que los contratos firmados hace tres décadas con la promotora de la estación se han resuelto por incumplimiento.
Por su parte, el consejo de administración de la sociedad Fomento y Desarrollo del Valle de Benasque, la firma propietaria de la estación de Cerler, va a presentar un contencioso administrativo contra la decisión municipal. Fuentes de Aramón argumentan que la reparcelación ya estaba aprobada y que jurídicamente es firme al no haber sido impugnada por terceros. Por ello, la empresa de la nieve de Aragón entiende que la decisión incurre en una «nulidad radical», tipificada en el artículo 62.1 de la Ley de Régimen Jurídico y Procedimiento Administrativo Común.
La primera fase de urbanización de 18,3 hectáreas podría haberse adjudicado directamente pero se hizo un concurso imitando al sector público, aunque Aramón sea una empresa mixta con un 50% de participación de la Diputación General de Aragón e Ibercaja. En ese contrato suscrito hace un año, se firmó el derecho de compra sobre las 11,9 hectáreas restantes, que se ha materializado ahora. El 80% de los terrenos pertenecían a Aramón.
La idea inicial del grupo de la nieve era vender las 18,3 hectáreas en una sola operación con la que esperaban obtener 120 millones de euros, que tenía el visto bueno de la DGA. Esta operación se inició tras la aprobación por parte del Ayuntamiento de Benasque en febrero de 2006 del Plan Parcial de Ordenación Urbana. Sin embargo, Ibercaja prefirió fraccionarla en tres fases y un periodo de cuatro o cinco años. Finalmente, la venta se ha ejecutado en un solo año, en dos operaciones y a un solo comprador.
La primera fase comprende 4,4 hectáreas en las que se construirán 366 viviendas, en una extensión de 2,9 hectáreas y en las 1,5 restantes se edificarán tres pequeños hoteles con 309 plazas. Sin embargo, todavía no se han iniciado las obras. El alcalde de Benasque, José Ignacio Abadías, apunta que no se ha aprobado la urbanización porque aún no han presentado los proyectos de captación de agua, red de abastecimiento, depósito de regulación y la red de depuración.