Zaragoza.- La comisión promotora de la ILP (iniciativa legislativa popular) por una Ley de protección de la alta montaña de Aragón, presentará su proyecto este jueves en las Cortes, a través del coordinador en Aragón de SEO-Birdlife, Juan Carlos Cirera.
En este sentido, la comisión desea que la proposición sea, al menos, aprobada a trámite, ya que consideran que sería la continuación del proceso democrático correcto y propio, “ya que una iniciativa popular de éxito merece, por lo menos, la consideración de un debate”, como ha señalado una de las integrantes de la plataforma, Blanca Beltrán.
De cualquier modo, y aunque la ley sea admitida a trámite, el resultado final podría llegar a diferir bastante del texto inicial. En este sentido, desde la comisión promotora, se habla de la necesidad de cumplir unos mínimos, entre ellos, la existencia de una moratoria “para que no se realicen grandes obras mientras no haya un marco jurídico sobre qué hacer o qué no”, ha indicado otro de sus integrantes, Paco Iturbe.
Se trata, en definitiva, de conseguir “un texto consensuado que recoja los intereses de todas las partes, sin excepciones, ni ambigüedades o contradicciones”, en palabras de Iturbe. Debe ser, por tanto, un texto claro y refundido.
En este sentido, la ronda previa de reuniones con los grupos parlamentarios desarrollada por la comisión, ha pretendido transmitirles la doble vertiente de la importancia de esta ILP. Por un lado, lo destacado de una iniciativa popular que ha conseguido tanto apoyo, algo que han calificado de “hecho excepcional en la Historia de Aragón”, además de la trascendencia del tema de las montañas, que se considera una de las señas de identidad más importantes de Aragón.
MIRANDO AL FUTURO
De momento, las iniciativas desarrolladas hasta el momento por la comisión surgían como consecuencia de acontecimientos. Sin embargo, “la Ley sí piensa en el futuro para regularlo desde hoy”, según Beltrán.
La respuesta está siendo, como han demostrado las firmas, bastante positiva. “En las ciudades y, sobre todo, en Zaragoza se rechazan mucho las actuaciones contra los espacios naturales. El caso de la montaña es peculiar, porque hay mucha gente que vive del esquí, pero también hay muchos que están conformes con los postulados de la plataforma, porque entienden que se acaba también con un medio de vida y un paisaje”, ha destacado otro integrante de la plataforma, Pepe Racaj.
Los principales problemas destacados por la comisión son la rivalidad y tensión generada a raíz de esto, entre los habitantes de las zonas de montaña, así como “el interés del Gobierno por fomentar el turismo de esquí y el desarrollo urbanístico de su entorno en la zona del Pirineo, porque si fuera algo general se habría desarrollado un Plan General de Aragón para el desarrollo de las zonas de montaña y no sólo unas directrices para el Pirineo aragonés”.