Así se decidió en la última reunión que mantuvieron hace dos semanas representantes de ambos territorios para hablar de las obras de mejora que se realizan en el túnel de Bielsa, foro en el que surgió la iniciativa. El documento que contempla todos los datos será presentado al Prefecto francés de la zona antes del 15 de este mes, según afirmaron fuentes de Gobierno de Aragón.
La decisión definitiva será tomará antes del 15 de junio, fecha tope que ha marcado el ejecutivo galo para dar una respuesta acerca de si aprueba o no esta iniciativa que beneficia a ambos territorios. Porque aunque los remontes y las pistas estarán en Francia, distan solo a 10 minutos en coche de Bielsa, que dispone de 800 camas y 2.000 plazas más en los dos cámpines con los que cuenta. Salnas, Lafortunada, Escalona, el valle de Chistau e incluso Aínsa, situado a media hora del túnel, suman cientos de habitaciones hoteleras más, algo de lo que adolece la estación gala, que a pesar de la crisis consiguió aumentar el número de esquiadores en la pasada temporada. Si bien sus cifras siguen rondando los 3.000 aficionados al día, lejos de los 9.000 de capacidad que dispone.
Las obras, sin fecha
Todo parece indiciar que no habrá problemas y que a principios de verano podrá comenzar a redactarse el proyecto definitivo para que el sueño de una estación de esquí para Sobrarbe sea una realidad.
La iniciativa ya ha pasado algunos de los pasos más conflictivos como es el estudio medioambiental previo, que no ha detectado afecciones ya que no se entra ni en el Parque Nacional ni en otros terrenos protegidos. Además se ha optado por una opción que descarta el terreno más escarpado, en el que resultaría difícil mantener la nieve. Sin embargo, todavía faltan detalles por concretar. Porque el Gobierno de Aragón decidió apoyar la ampliación de la estación de Piau Engaly técnicamente, pero también económicamente y hay aspectos que todavía están por definir, según adelantaron fuentes del Gobierno de Aragón.