Es el único PORN que prohíbe especialmente la construcción de este tipo de infraestructuras. Todos los partidos de las Cortes castellano-leonesas creen que es la mejor solución para revitalizar la zona, mientras los ecologistas opinan que dañará irremediablemente la montaña y las colonias de osos pardos que viven en ella.
Un grupo de ecologistas intentó a principios de mes impartir una charla sobre las desventajas de la estación en Velilla del Río Carrión. La asociación Salvemos la Montaña Palentina impidió con sus gritos y pancartas que se celebrara el acto. Este suceso es sólo una muestra más de las apasionadas pero encontradas opiniones que suscita el proyecto. Por un lado, los promotores, la mayor parte de los municipios de la zona y los todos los partidos en las Cortes autonómicas consideran que es la mejor solución para revitalizar la zona. Mientras, unos 70 colectivos, en su mayoría ecologistas, consideran que el daño medioambiental será irreparable y que detrás se esconden intereses especulativos.
La estación de San Glorio se ubicará en dos espacios protegidos: el Parque Natural de la montaña palentinay el Parque Regional de Picos de Europa, en León. A nivel europeo, toda la comarca está incluida la Red Natura 2000. Además, está contemplada en los proyectos de recuperación del oso pardo. Según el catedrático en Zoología Francisco Purroy, el lugar en el que se construiría la estación es el principal pasillo de comunicación entre dos poblaciones de este animal. La estación «le causaría un impacto crítico», afirma, al igual que a otras especies.
Pero, además del valor ambiental, la comarca se caracteriza por la crisis económica y demográfica que afecta a las zonas rurales. En el pueblo en el que sucedió el altercado, de unos 1.200 habitantes, 50 se marchan cada año porque no hay trabajo. En la vertiente leonesa, según el presidente de la Mancomunidad de Riaño, Porfirio Díaz, hace tiempo que se superó «la barrera de la desertización. Hay 1,4 habitantes por kilómetro, casi todos ancianos».
350 empleos directos
Los jóvenes se marchan a estudiar el bachillerato y ya no vuelven, salvo por vacaciones. Los promotores de la estación, la empresa Tres Provincias, asegura que se crearán 350 puestos de trabajo directos y hasta 2.000 indirectos. Un caramelo difícil de rechazar. Todos los municipios de la zona, salvo una abstención, votaron a favor de que se reforme el PORN. Ante «el amplísimo consenso social», la Junta (gobernada por el PP) decidió llevarlo a cabo, según explica el consejero de Medio Ambiente, Carlos Fernández Carriedo.
Todos los partidos con representación apoyan la decisión, aunque tienen sus diferencias. El PSOE presume de haber defendido siempre la estación -la incluye en su programa-, ya que supone «la solución, sin alternativas, para ambas montañas», según su secretario general, Ángel Villalba. El PSOE incluso acusa al PP de redactar hace siete años el PORN «con el argumento de buscar la prohibición de la estación porque era una propuesta de socialista».
El consejero de Medio Ambiente, por su parte, precisa que la norma veta el esquí «porque en aquel momento no existía la oportunidad y se pensaba en las estaciones del pasado». Pero, «el proyecto actual se ha madurado con las ideas de la zona y es compatible con el respeto al medio ambiente», asegura.
Sin embargo, en diversos momentos de la conversación telefónica reitera que la reforma no está vinculada a un proyecto concreto. «Primero modificaremos el PORN porque estamos convencidos de que son compatibles algunas estaciones y el respeto al medio ambiente y luego se valorará qué tipo de estación», explica el consejero.
En más altas instancias del PSOE, sin embargo, se duda de que el proyecto sea tan benéfico. La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, se hizo eco de las posturas ecologistas y envió una carta al consejero para transmitirle que «el impacto ambiental de esa posible estación de esquí es un impacto muy considerable», según afirmó en la Cadena SER. Narbona no tiene competencias sobre la modificación del PORN. Además, los promotores decidieron construir en la primera fase sólo en Castilla y León porque si edificaban a la vez en Cantabria necesitarían luz verde del Estado, «lo que retrasaría el proyecto», según reconoció un portavoz.
Desestimadas las alegaciones
Se han presentado 143 alegaciones particulares a la reforma, un 30% de fuera de Castilla y León. El Gobierno autonómico ha desestimado todas; las presentadas por los ecologistas, «alegando simplemente que se hace para incentivar el desarrollo de la zona», según Javier Escudero, de Ecologistas en Acción y promotor de la Plataforma en Defensa de San Glorio.
Escudero responde que «se llevan años destinando fondos públicos para, precisamente, combatir esta situación», como los europeos Miner para la dinamización de cuencas mineras. «¿Adónde ha ido a parar este dinero?», se pregunta. Escudero propone que se lleven a cabo los planes de actuación «que la Administración ha redactado en infinidad de veces», como el fomento del turismo rural, los deportes de aventura, el desarrollo del sector agroalimentario, la restauración de las minas, etcétera. «Individualmente no son grandes empresas, que creen cientos de puestos de trabajo, pero impedirían que la comarca perdiese, en caso de crisis en el sector o de la nieve y después de hipotecar sus tierras, la última esperanza de recuperación poblacional».
En esta línea, el profesor de Geografía Manuel Frochoso critica el proyecto porque «va a generar una dependencia del turismo». Para él, se debería buscar «un desarrollo diversificado y endógeno. Con la estación, las grandes inversiones serán externas y los beneficios también se irán al exterior».
La agrupación local Salvemos la Montaña Palentina se enfrenta radicalmente a estas críticas. En una nota que emitió a raíz del altercado explica que la zona se está jugando «un futuro muy interesante y prometedor» que frenará el «descenso espectacular» de la población. Acusa a los ecologistas de «no conocer la zona ni sus problemas». «Su interés es tener la montaña sin población para venir los fines de semana desde la capital donde tienen sus trabajos y su sueldo fácil», concluye.
Una vez aprobada la reforma del PORN, el proyecto de deberá pasar una declaración de impacto ambiental. Sin embargo, los ecologistas aseguran que llevarán la queja hasta Bruselas. Ya hay un precedente: la UE expedientó al Gobierno catalán por desproteger un valle para ampliar Baqueira Beret.