Aramón y el Ayuntamiento de Benasque tienen bastante avanzado un acuerdo que busca normalizar las relaciones entre ambas entidades cerrando así cuatro años de conflictos y enfrentamientos. El grupo de la nieve está dispuesto a pagar la mitad de la telecabina que conectará el casco urbano de Benasque con Cerler, pero a cambio exige que el Consistorio deje de poner trabas a sus actuaciones.
Fuentes próximas a Aramón destacan, no obstante, que la conexión entre el fondo del valle y la estación de esquí no se haría mediante un arrastre tricable, tal y como pedía hasta ahora el equipo de gobierno que lidera el aragonesista José Ignacio Abadías. «Sería una telecabina monocable que costaría unos ocho millones de euros, menos de la mitad de lo que valía el que reclamaba el Ayuntamiento», aclaran.
Las mismas fuentes recuerdan, además, que la intención inicial del Consistorio benasqués era que fuera el grupo de la nieve quien financiara íntegramente la infraestructura. «Estamos dispuestos a llegar a un acuerdo porque creemos que es lo mejor, pero para lograrlo todos vamos a tener que ceder», explican desde el entorno de Aramón.
Tanto el ‘holding’ como el alcalde de Benasque reconocen que está habiendo «avances» y que ven «factible» llegar a un acuerdo definitivo. Si es así, las dos partes firmarán un nuevo convenio que sustituirá al que ya suscribieron en agosto de 2005, que a su vez está en el origen de la guerra que les enfrenta desde el año 2007.
Los desencuentros
El Ayuntamiento cree que el grupo de la nieve ha incumplido ese primer convenio. Su descontento ha llevado al equipo de gobierno a tomar decisiones que desde 2007 han obstaculizado los planes y la actividad de Aramón en el valle llegando a frustrar la venta de unos terrenos por los que el grupo empresarial iba a ingresar más de 100 millones de euros.
La sociedad participada al 50% por la DGA e Ibercaja se ha defendido en los tribunales y los jueces le han dado la razón en casi todos los casos. Sin embargo, esas victorias legales no han desbloqueado sus proyectos. Por eso hace ya unos dos años el Gobierno de Aragón medió en unas primeras negociaciones en las que llegó a estar presente su vicepresidente, José Ángel Biel, y que no llegaron a buen puerto.
Fuentes cercanas a Aramón explican que las conversaciones que se están manteniendo ahora comenzaron «hace unos meses» a propuesta del alcalde de Benasque y que las llevan el propio Abadías y el director general del grupo, Javier Andrés. Los avances que se van produciendo en la negociación ya han permitido redactar un borrador de convenio que, aunque todavía puede sufrir cambios, parte de una premisa básica: el Ayuntamiento tendrá que dejar de obstaculizar las actuaciones de Aramón, y si es así el ‘holding’ pagará la mitad de una telecabina monocable entre Benasque y su estación de esquí.
Lo que exige el grupo
El punto central del listado de conflictos que deberá resolver el convenio será el desbloqueo de la ampliación de la urbanización de Cerler. Para cumplir lo acordado, el Consistorio benasqués deberá llegar a acuerdos con el grupo de la nieve que permitan aprobar definitivamente los proyectos de reparcelación y/o urbanización de las dos unidades de ejecución en las que están repartidos esos terrenos (la UE1 y la UE2).
El grupo empresarial también reclama que las actuaciones que se lleven a cabo en la estación de esquí o en sus futuras ampliaciones no paguen el impuesto de construcciones, posibilidad que está recogida en las ordenanzas municipales y que sin embargo el equipo de gobierno no aplica. Del mismo modo, Aramón pide que el Ayuntamiento le rebaje el canon que la estación de esquí paga por la ocupación de los montes de utilidad pública municipales -según el grupo, de 90.000 euros anuales subió de golpe a 300.000-.
La nueva telecabina
A cambio, Aramón se compromete a empezar a construir la telecabina en los tres años siguientes a la firma del convenio, plazo que no será aplicable si el Consistorio incumple alguno de los anteriores requisitos. El coste del arrastre se repartirá al 50%, pero el Ayuntamiento deberá aportar los terrenos tanto para la nueva infraestructura como para el aparcamiento en superficie que se construirá junto a ella.
Fuentes próximas al grupo de la nieve reconocen que una telecabina monocable será más vulnerable a los vientos que la tricable que reclamaba el alcalde. También admiten que tendrá menos capacidad de transporte y que es probable que haya que volver a someterla a evaluación ambiental, ya que de los dos apoyos del proyecto inicial se pasará a una quincena aumentando así el impacto.
Pese a todo, las mismas fuentes aseguran que la telecabina monocable «será más que suficiente» para crear un acceso alternativo a Cerler. Además, recuerdan que de esta forma el presupuesto del proyecto rondará los 8 millones de euros, una cantidad muy inferior a la que requería la actuación solicitada por el Consistorio -unos 18 millones sin contar el coste de un aparcamiento subterráneo-.
Un nuevo acceso a la estación que descongestione la carretera. La telecabina entre Benasque y Cerler es una vieja aspiración del valle para crear un nuevo acceso a la estación de esquí y descongestionar así la carretera evitando los problemas que se dan cuando nieva.