Los consejos de administración de las estaciones de esquí de Aramón en la provincia de Huesca acabaron ayer en Zaragoza sin que el grupo empresarial y los ayuntamientos afectados alcanzaran un acuerdo sobre el cobro de los abonos de temporada a los residentes. Aramón se mostró dispuesta a «estudiar» las propuestas, pero no cedió en su pretensión de hacer pagar el 50% de los forfaits a partir de esta temporada, mientras que los representantes de los consistorios hicieron valer sus derechos para mantener la situación anterior y amagaron con tomar medidas compensatorias.

Este fue el caso de Ricardo Laguna, alcalde de Panticosa, quien planteó, «como último recurso», cobrar a Aramón un alquiler por el uso de monte público, «al igual que hacen los ganaderos por la utilización de pastos». «No se puede legalmente regalar un monte público», afirmó Laguna, que por otro lado se mostró comprensivo «con la difícil situación económica que atraviesa Aramón».

En la actualidad, Panticosa percibe un canon «simbólico», por un montante de 1.000 euros, «aunque el valor real asciende a 150.000 euros». Sin embargo, Laguna, que cree que «al final se llegará a un acuerdo», considera que la casi gratuidad de los abonos (cada vecino que esquía paga 20 euros al año) debe seguir aplicándose como forma de compensar por la utilización de las propiedades municipales.

Jesús Gericó, alcalde de Sallent, aseguró que Aramón ya ha incluido en sus presupuestos los ingresos que espera obtener al cobrar la mitad de los pases a los residentes. Pero el regidor sallentino subrayó que para su corporación el mantenimiento de la situación anterior es «innegociable». «Que no cuenten con un solo euro de Sallent», afirmó Gericó, que señaló que este año el ayuntamiento ha aplazado el cobro de la mitad del canon, que asciende en total a 180.000 euros.

Por su parte, Luz Gabás, alcaldesa de Benasque, resaltó que tanto Formigal como Cerler y Panticosa se mantienen «firmes» frente al intento «unilateral» de Aramón de modificar los convenios vigentes. «El hecho de que no cobren a los residentes o de que estos paguen una cantidad inferior a la estipulada no tiene nada que ver con el agujero que arrastra Aramón», indicó la alcaldesa. Luz Gabás se refirió asimismo a los 72 millones que Aramón reclama a su consistorio. «Como dicen los informes, no hay relación casual entre la operación fallida de compra y la decisión municipal», dijo.