Ibercaja obtuvo en 2012 pérdidas por un valor de 485 millones de euros después de que durante el pasado ejercicio llevara a cabo provisiones por 1.433 millones de euros, casi siete veces más que en 2011. Pese a estos resultados, Ibercaja se consolida como una de las entidades más sanas y solventes del conjunto del país.
La entidad provisionó 1.433 millones de euros en 2012
Zaragoza.- Ibercaja ha cerrado el ejercicio de 2012, con unas pérdidas de 485 millones de euros, causadas por el esfuerzo realizado por la entidad para provisionar hasta 1.433 millones de euros, una cantidad 6,8 veces superior a la de 2011. Ibercaja cumplía así con los nuevos requisitos de provisiones, incrementando sustancialmente el saneamiento de sus activos inmobiliarios en un solo ejercicio, cumpliendo íntegramente con las exigencias de los Reales Decretos y sin recurrir a la venta de ningún activo estratégico. Así lo ha dado a conocer la entidad bancaria este viernes.
En un ejercicio «especialmente complicado» para el sector financiero, Ibercaja ha acreditado la fortaleza de sus ingresos recurrentes que, sumados a los ingresos extraordinarios destinados a cubrir las necesidades de capital dictaminadas por Oliver Wyman, le han permitido obtener unos resultados antes de saneamientos de 748 millones, un 163% más que en 2011. Además, ha logrado situar su ratio de capital en un 10,4%, muy por encima del 9% exigido a partir del 1 de enero de 2013, y ha contenido su ratio de morosidad en el 5,48%, un 48% inferior a la media del sistema.
«Más allá de estos resultados, Ibercaja ha logrado su objetivo de consolidarse en el grupo de entidades más sanas del país en el proceso de la profunda y exigente reestructuración del sistema financiero español, que se espera alcance su punto de inflexión en este 2013, un proceso fundamental para la recuperación de la economía española», afirman desde la entidad.
Así pues, Ibercaja ha concluido el «adverso 2012» preservando las fortalezas que le permiten ser «una de las entidades más solventes de España y de las pocas cajas de ahorros que siguen siendo dueñas al 100% de su banco: acreditada capacidad para generar resultados, elevado capital, posición holgada de liquidez y control de la morosidad», aseveran desde la propia entidad.
«Entre las fortalezas de Ibercaja destaca la capacidad para generar resultados. El margen recurrente minorista, que no tiene en cuenta resultados extraordinarios, se ha situado en 315 millones, un 33,68% más que en 2011. Por otro lado, la gestión activa de carteras de renta fija y variable, junto a otras operaciones extraordinarias destinadas a cubrir los requerimientos de capital de Oliver Wyman -evaluadas en 226 millones de euros para el escenario más adverso-, han generado ingresos por otros 433 millones de euros. En estas operaciones extraordinarias se incluye la cesión de la depositaría de fondos de inversión y planes de pensiones a CECA, la recompra de deuda subordinada y otras emisiones mayoristas, el acuerdo de exclusividad con Caser para la distribución de seguros generales (no vida) y la operación de venta y alquiler de medio centenar de inmuebles de uso propio», detallan en su comunicado.
Además, fruto de la política de contención que aplica la entidad desde el inicio de la crisis, este año se ha seguido avanzando y los gastos de explotación se han reducido un 4,4%. Los resultados antes de saneamientos ascenderían así a 748 millones, un 163% más que en 2011.
Tras realizar el «importante esfuerzo» de saneamiento de sus activos de 1.433 millones de euros en un único ejercicio, Ibercaja mantiene unos índices de solvencia del 10,40% de los activos ponderados por riesgo, un 1,4 más del ratio de capital o Core Tier I EBA, exigido por el Real Decreto-ley 24/2012. Por ello, posee un exceso de capital sobre el 9%, exigible a partir del 1 de enero de 2013, de 272 millones de euros.
Después de la aplicación de los dos reales decretos del Gobierno sobre activos inmobiliarios, la cobertura de provisiones de los riesgos dudosos es del 88,82%.
Preservar la liquidez y la calidad de los activos ha sido también objetivo prioritario durante el ejercicio. Ibercaja gestiona la liquidez diversificando las fuentes de financiación de forma prudente y equilibrada, anticipándose a sus necesidades para que no condicione la actividad inversora. En 2012 ha mantenido una holgada posición y los activos líquidos disponibles, 5.467 millones de euros, representan más del 12% del balance.
La ratio de morosidad del crédito del Grupo es del 5,48%, con un diferencial favorable respecto al del conjunto de entidades de 5,10 puntos porcentuales o un 48% inferior a la media. Esta posición ha sido ratificada en los exámenes de Oliver Wyman, que sitúan a Ibercaja como la segunda entidad con menor perdida esperada de crédito e inmuebles adjudicados en el escenario más adverso. Sirva como dato que la financiación a hogares destinada a adquisición de vivienda, la más significativa de Ibercaja, tiene un índice muy reducido: el 1,77%.
Desde la entidad explican que durante 2012, Ibercaja ha continuado «su estrategia de reducir su exposición a la promoción inmobiliaria y fortalecer las coberturas asociadas a dicho riesgo». El valor neto de los activos inmobiliarios adjudicados o adquiridos en pago de deudas es de 772 millones y la cobertura asociada a estos activos es del 48,39%, llegando en el caso del suelo al 58,30%. A su vez, la exposición neta del crédito al sector promotor se ha reducido un 34,50% en un año y se ha desarrollado una intensa política comercial de venta de inmuebles, con un resultado de 3.170 viviendas enajenadas, entre las que eran propiedad de Ibercaja y las que pertenecían a promotores clientes de la Entidad.
En 2012, el volumen de actividad de Ibercaja asciende a 62.100 millones de euros. De ellos, 30.664 corresponden al crédito y 31.436, a los recursos de clientes.
En crédito a clientes, en 2012 se han producido casi 60.000 nuevas operaciones por un importe de 2.979 millones de euros. Es de señalar que las formalizaciones con pymes se elevan un 3,5 %, como resultado del interés del Grupo por potenciar su implantación entre las pequeñas y medianas empresas. Mientras, las nuevas operaciones del sector promotor caen un 37,4%. En el ámbito de la empresa, Ibercaja ha sido una de las entidades más activas en la financiación a través de líneas ICO, aumentando su cuota hasta el 2,83% frente al 2,12% en 2011. En su conjunto, la caída del crédito minorista ha sido del 5,17%, un porcentaje que hay que enmarcar en el proceso de desapalancamiento de la economía española, que en su conjunto ha caído un 8,1%.
En los recursos de clientes, la política comercial de Ibercaja se ha enfocado a la protección de los márgenes de negocio, evitando entrar en la guerra de pasivo y potenciando la comercialización de productos fuera de balance en la que el Grupo ocupa una posición relevante.
La evolución de los fondos de inversión, planes de pensiones y seguros ha sido «muy positiva», ganando cuota de mercado en todas las líneas. Así, en fondos, la Entidad incrementa su participación en 16 puntos básicos, hasta el 3,61%, la máxima alcanzada por el Grupo desde su creación. En planes de pensiones, la cuota de mercado crece 4 puntos básicos, llegando al 5,55% y a la sexta posición del ranking del sector. En seguros de vida, el avance es del 8%, sensiblemente superior al experimentado por el sistema, lo que ha llevado a Ibercaja a ganar dos posiciones en el ranking hasta la séptima posición e incrementar su cuota en 18 puntos básicos, hasta el 3,15%.
Asimismo, gestión y productos han sido premiados por observadores externos. Ibercaja Gestión ha sido galardonada por Lipper en reconocimiento a la calidad de gestión de los recursos de clientes que administran. También por All funds bank-Expansión, que la ha posicionado como una de las cuatro mejores gestoras de fondos de España tras valorar la calidad de la gama de fondos, servicio, compromiso, grado de satisfacción del partícipe, imagen y trayectoria continuada en el mercado. Asimismo, han sido premiados dos de sus productos. Lipper ha elegido a Ibercaja Capital Europa FI como el mejor fondo en España a tres años, en la categoría Renta Variable Mixta. E Ibercaja Pensiones Patrimonio Dinámico ha sido elegido como mejor plan de pensiones mixto defensivo euro, por Morningstar.
EL PERIODICO DE ARAGON
Sin contabilizar las dotaciones, la entidad obtuvo un resultado positivo de 748 millones durante el 2012. La compra de Caja3 sigue vinculada al cumplimiento de la hoja de ruta que marcó Bruselas para este grupo
Ibercaja cerró el ejercicio del 2012 logrando su objetivo prioritario: consolidarse entre el grupo de entidades bancarias más sanas del país. Y lo ha conseguido sin haber recibido, en ningún momento de la crisis, ayudas públicas. Eso sí, los sacrificios que ha tenido que hacer se han dejado sentir sobre su cuenta de resultados del pasado año, que arrojó unas pérdidas de 485 millones de euros frente a los 54 millones que ganó en el 2011. El motivo de este retroceso se debe al saneamiento de su balance, principalmente activos inmobiliarios, que ha tenido que realizar para cumplir con las nueva regulación y las exigencias adicionales de solvencia. En total, Ibercaja provisionó 1.433 millones de euros, 6,8 veces más que en el ejercicio precedente. Sin contar estas dotaciones, obtiene un resultado positivo de 748 millones.
El 2012 ha sido, posiblemente, uno de los años más difíciles a los que se ha enfrentado la entidad aragonesa en sus 137 años de historia. Ha tenido que bregar con la recesión económica, el descenso de la actividad y los profundos cambios regulatorios surgidos en el sector. En concreto, los dos decretos del Gobierno sobre la depuración del ladrillo y las exigencia de capital adicional requeridas por la auditoría que elaboró en septiembre la consultora Oliver Wyman.
En este sentido, destaca el hecho de que la caja de ahorros –que opera a través de la sociedad Ibercaja Banco– ha saneado sus activos inmobiliarios en un solo ejercicio, en lugar de dos años como han podido hacer casis todas las entidades por haber fusionado con otras. Además, lo ha hecho sin recurrir a la venta de ningún activo estratégico.
DUEÑOS AL 100%Tras este duro periplo, su ratio de capital se situó en el 10,4%, por encima del 9% exigido desde enero del 2013, y contuvo su ratio de morosidad en el 5,48%, un 48% inferior a la media del sistema. Estas cifras dejan la cobertura de provisiones de los riesgos dudosos en el 88,82%.
«Ibercaja ha logrado su objetivo de consolidarse en el grupo de entidades más sanas del país en el proceso de la profunda y exigente reestructuración del sistema financiero español», aseguró ayer la entidad presidida por Amado Franco en una nota de prensa. Remarcó asimismo que es «una de las pocas cajas de ahorros que siguen siendo dueñas al 100% de su banco» y que tiene entre sus fortalezas la capacidad para generar resultados. Así, el margen recurrente minorista, que no tiene en cuenta resultados extraordinarios, se situó en 315 millones, un 33,68% más que en el 2011.
Por otro lado, la gestión de carteras de renta fija y variable, junto a otras operaciones extraordinarias destinadas a cubrir el déficit de capital estimado por Oliver Wyman –evaluadas en 226 millones de euros para el escenario más adverso–, han generado ingresos por otros 433 millones de euros. En estos movimientos se incluye la cesión de la depositaría de fondos de inversión y planes de pensiones a CECA, la recompra de deuda subordinada y otras emisiones mayoristas, el acuerdo de exclusividad con Caser para la distribución de seguros generales (no vida) y la venta y alquiler de medio centenar de inmuebles de uso propio.
La política de contención que aplica la entidad desde el inicio de la crisis le permitió reducir sus gastos de explotación el 4,4% en el 2012. Además, mantuvo una holgada posición y los activos líquidos disponibles, con 5.467 millones de euros (más del 12% del balance).
Ibercaja confía en que el 2013 marque un «punto de inflexión» en la reestructuración del sistema financiero, «un proceso fundamental para la recuperación de la economía española». En este año deberá culminar además la absorción de Caja3, con la que ya firmó un preacuerdo para su adquisición. Para que la operación llegue a buen puerto, el grupo liderado por CAI necesita resolver las tres principales exigencias marcadas desde Bruselas: reestructurar la plantilla, liquidar las preferentes y transferir sus activos inmobiliarios al banco malo.