Aunque la aprobación generó cierto debate, la ratificación del plan inicial se hizo por unanimidad y el anteproyecto pasará a exposición pública a partir de mitad de este mes de setiembre para que vecinos, colectivos, entidades y otros afectados puedan presentar alegaciones durante un periodo de un mes.
Según explicaron ayer fuentes municipales, una vez transcurra el plazo de alegaciones, el plan provisional será trasladado a administraciones superiores competentes (Urbanismo de la DGA) para que lo analicen antes de su aprobación o no definitiva.
El plan inicial aprobado por el consistorio el pasado miércoles sigue los planteamientos expuestos hasta ahora de crecimiento urbanístico vinculado al proyecto del holding Aramon (DGA e Ibercaja) para la ampliación de la estación de esquí de Cerler hacia el valle de Castanesa (municipio de Montanuy).
Entre los aspectos que destacan de este plan inicial se halla la consolidación de los terrenos de Casa d’Arro (cuya opción de compra de Aramon se materializó ya el año pasado) y los de Casa Quintana (propiedad próxima a Casa d’Arro y cuya opción de compra de Aramon se ha materializado recientemente) como el centro neurálgico donde Aramon pretende levantar el nuevo resort turístico de Cerler.
Otros aspectos relevantes del plan son la constatación de la declaración como espacio protegido del centro del núcleo urbano de Montanuy, que lo excluye de operaciones o actuaciones urbanísticas concretas, así como una rebaja de hectáreas urbanizables en poblaciones como Montanuy, Castanesa, Ardanuy y Noales respecto a lo previsto inicialmente. Señiu sigue siendo el núcleo con mayor número de hectáreas urbanizables dentro del futuro plan. Según explicaron las mismas fuentes municipales, el consistorio enviará la próxima semana una carta a los vecinos para informarles del inicio del plazo de alegaciones, que empezará a partir del 15 de setiembre.
El PGOU de Montanuy es uno de los pilares del convenio que Ayuntamiento y Aramon suscribieron hace cuatro meses para el macroproyecto de Cerler.