Críticas por primar la «especulación» frente al medio ambiente en el valle del aragón

La reciente alegría de los vecinos del valle del Aragón por la posible unión de las estaciones de esquí de Candanchú y Astún con Formigal contrastaba ayer con las manifestaciones de los partidos de la oposición, IU y CHA, por la decisión de Medio Ambiente de retirar la catalogación de Canal Roya como Lugar de Interés Geológico. Ambas formaciones tildaron esta decisión de «oportunista» y «tremendamente electoralista».

En el caso de IU, las críticas han llegado hasta Bruselas. El candidato a la presidencia del Gobierno aragonés, Adolfo Barrena, envió ayer al eurodiputado de IU, Willy Meyer, la documentación relativa a este proyecto a la espera de que el departamento de Medio Ambiente publique el Decreto de Lugares de Interés Geológico en el Boletín Oficial de Aragón (BOA).

Barrena recordó ayer que en el anteproyecto de este plan de protección geológica, se prevé la prohibición de todas aquellas actividades que impliquen alteraciones morfológicas o la creación de infraestructuras. Ante esta falta de «compromiso», IU va a ampliar el expediente de la queja que presentó sobre la ampliación de Cerler por Castanesa y sobre el modelo urbanístico en Aragón y que la Comisión de Peticiones del Europarlamento tiene todavía abierta.

Desde CHA, van más allá y consideran que esta medida es claramente «electoralista». En este sentido, el diputado Bizén Fuster mostró su desagrado por las «contradicciones» del departamento de Medio Ambiente. «Resulta duro comprobar que en lugar de proponer la protección de estos ambientes hace todo lo contrario, apoyando la unión de pistas. Eso es así porque está supeditado a los intereses de proyectos industriales, de nieve o de todo lo relacionado con el desarrollo especulativo».

Un circo oportunista

Favorable a esta decisión, pero poco convencido con el momento elegido para hacerlo, se mostró el candidato a la DGA por el PP, Eloy Suárez. El actual portavoz en las Cortes aseguró que su partido «siempre ha sido partidario» de la unión de las estaciones de esquí y confían en que sea un proyecto serio y no una decisión meramente electoral. «No entendemos el circo que se ha organizado respecto a la protección de determinadas zonas y confiamos en que se hayan hecho las cosas bien y no haya problemas en un futuro cercano».

Para el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, esta decisión del Gobierno de Aragón supone «una dificultad menos para desarrollar el proyecto olímpico de 2022». Una decisión, que según el máximo responsable zaragozano, «se ha tomado por razones objetivas y no por las olimpiadas».

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