Aramon y el «pelotazo» de barbastro

El señor Beclua no es más que el exponente de esa realidad económica, presidida por el ladrillo, la especulación, la picaresca y el descaro. En suma, negocios que no producen riqueza ( a la larga pobreza como se verá dentro de poco), generan inflación, drenan recursos para otras actividades, limitan el consumo y la demanda, y desmoralizan a la sociedad y los valores que aún le puedan quedar.

Blecua es el que hasta ahora ha conducido, a través de la empresa Aramón, y con la autorización de un partido socialista regional, puesto manos del PAR, el destrozo del Pirineo oscense a golpe de convenio urbanístico. Y este señor, y muchos otros como él, son la compañía habitual de nuestros políticos, la salsa en la que se desenvuelven en homenajes, conferencias, y actos sociales. ¿ Dónde están los proyectos de I + D ? ¿ dónde el riesgo empresarial ? ¿ dónde la creación de riqueza y la economía productiva?

Con Formigal se despilfarraron por Aramón ( empresa participada por la DGA e Iber Caja) millones en destrozos en la montaña y agrietamientos de obras; ha seguido la empresa adelante con sus proyectos de ampliación de estaciones de esquí, a pesar de que dentro de poco nos vamos a quedar todos sin nieve o muy reducida por el cambio climático; ahora su consejero delegado, a título particular, se ve envuelto en una operación de lo más turbio y zafio ¿ dará explicaciones esta vez la DGA y su presidente ? ¿ se tomarán medidas para destituir a estos personajes ? ¿ Hasta cuándo seguirán abusando de nuestra paciencia ?

Nadie duda de la honradez y natural austeridad del Alcalde de Barbastro. Eso está fuera de toda duda. Basta haberlo conocido y seguir su trayectoria, como lo saben los vecinos de Barbastro y los de toda la provincia ; pero el edil no puede escudarse en haber cumplido los trámites legales en la compra de los terrenos. Él no es un funcionario y por eso se le debe exigir algo más. No basta con cumplir con la burocracia, con el reglamento en la mano pueden hacerse verdaderas barbaridades

Si se sospechaba un enriquecimiento especulador a cargo del sr. Blecua, colocándose éste, en medio de una operación de compra de terrenos, diseñada desde hace tiempo por los poderes públicos, hay que parar dicha operación como sea. Lo importante no es contar con los terrenos y la localización rápida de una u otra industria en los mismos ; lo primero es no permitir este tipo de comportamientos y dar ejemplo a la ciudadanía ; si fuere preciso renunciando a la operación, y creando las condiciones urbanísticas para que, otros suelos, puedan ser aprovechados para los mismos fines.

La operación tiene evidentemente un coste político para el alcalde de Barbastro, aún en el caso, muy probable, de que hubiera pecado por falta de diligencia “ in vigilando” ; y también para el Presidente de nuestra comunidad autónoma, que como se ve no anda en buenas compañías. Dentro de poco la ciudadanía tiene la palabra en las urnas y deberá valorar estas conductas. Lo que importan son los hechos, es decir el QUE y no QUIÉN haya podido destapar la operación y la haya podido filtrar a la prensa.